| La verdadera austeridad republicana |
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Actualizado: 2018-07-17 |
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FELIPE DE JES�S FERN�NDEZ BASILIO
DESDE A JANELA
LA VERDADERA AUSTERIDAD REPUBLICANA
Ahora que se habla tanto de un plan nacional de austeridad republicana es conveniente reflexionar un poco sobre lo que la misma significa, as� como lo que se pretende hacer con las dificultades que conlleva, as� como lo que no se ha dicho y podr�a lograr un mayor ahorro para las arcas estatales.
El t�rmino austeridad republicana no fue creado por Ju�rez ni mucho menos por L�pez Obrador, ya que dicha expresi�n viene desde la antig�edad y se utilizaba para distinguir a aquellos Estados que carec�an de rey y que eran gobernados por magistrados que desempe�aban sus funciones sin grandes lujos en contraposici�n a otros que contaban con reyes y cortes sumamente ostentosas, siendo ejemplo de los primeros las ciudades griegas o la Roma inicial y de los segundos el Egipto de los faraones o la Persia Aquem�nida o Sas�nida as� como la Roma imperial y despu�s se volvi� a utilizar en tiempos de la Ilustraci�n y de la revoluci�n francesa cuando se pretendi� acabar con los lujos de las cortes de los llamados �D�spotas Ilustrados� y algo parecido es lo que se pretende hacer en el M�xico de 2018.
Sin embargo y aunque suena bonito el camino que se pretende transitar en el pa�s, aunque tiene algunos aciertos, no es del todo viable para conseguir el tan anhelado objetivo y digo tan anhelado, porque fue una de las principales razones que condujeron al electorado a votar por quienes pr�ximamente van a gobernar tanto en la federaci�n como en algunos estados.
AMLO prometi� y sostiene que recortando a la mitad el sueldo del Presidente y de los altos funcionarios de todos los niveles del Estado mexicano va a lograr ahorros y va a acabar con el dispendio que costear dichos salarios acarrea para la administraci�n p�blica y permitir� destinar esos fondos para otros fines del Estado como lo son la obra p�blica, la salud y la educaci�n.
En ello tiene algo de raz�n, ya que muchos sueldos son verdaderamente altos y no acordes a la realidad, sobre todo si vemos las llamadas �compensaciones� que se otorgan a los altos funcionarios o prestaciones que se dan a los mismos como lo son los seguros particulares, los cuales son gastos innecesarios ya que por el solo hecho de trabajar para el gobierno se es derechohabiente del ISSTE y el gobierno como patr�n tiene que aportar las cuotas que le corresponden y con ello se garantiza el acceso a los servicios de salud tanto del funcionario como a su familia.
Mas tampoco se puede pagar poco si lo que se pretende es contar con especialistas en puestos claves y que requieren dedicaci�n de tiempo completo en el cargo que desempe�an y que adem�s adquieren una gran responsabilidad al ocuparlo, ya que no es lo mismo contratar a un jornalero que a un especialista en seguridad p�blica, ya que el grado de responsabilidad entre uno y otro es muy diferente y por ello cae solito el argumento que pulula en muchos medios de comunicaci�n que consiste en comparar los salarios de los ministros de la corte o de los integrantes del INE con los de los obreros, ya que las responsabilidades de los segundos distan mucho de las de los primeros.
Pero si hablamos de ahorro, nada nos han dicho acerca de recortar plazas burocr�ticas y ah� s� hay mucho de donde poder eliminar gastos suntuosos, ya que basta con entrar a casi cualquier dependencia p�blica y m�s en la ciudad de M�xico para ver la gran cantidad de trabajadores que tiene el Estado a su servicio, ya que podemos ver hay miles y miles de empleados que cobran un salario sin hacer nada especializado y muchas veces hasta duplicando o triplicando funciones y si bien cobran un salario bajo con prestaciones, lo hacen por miles y en su totalidad esos sueldos implican tanto o m�s miles de millones de pesos que los que la alta burocracia cuesta al erario p�blico.
Y el Estado se ha llenado de bur�cratas de bajo nivel debido a premios que se han dado a quienes apoyaron campa�as pol�ticas, a compadrazgos, a nepotismos y a un sin n�mero de situaciones propias del r�gimen del viejo PRI y que ahora el nuevo, ll�mese Morena, pretende mantener.
Si en verdad se quiere ahorrar dinero y tener un Estado austero y eficiente, se debe de dejar atr�s la creencia de que el Estado debe de ser el gran empleador y dejar esa tarea a la econom�a privada, ya que los empleos se crean y se pagan de acuerdo a la necesidad de los mismos y no por d�diva del gobernante en turno, ya que lo contrario estanca a la econom�a de cualquier pa�s y para comprobarlo basta con comparar el tama�o del aparato estatal de un pa�s desarrollado y de uno que no lo est� y lo dem�s son cuentos demag�gicos y si realmente se busca una verdadera austeridad republicana, por ah� se puede empezar.
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Twitter: @FelipeFBasilio
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