| Astrolabio Político 
 Veracruz disminuye pobreza 
 Por: Luis Ramírez Baqueiro 
   
 “Pobre no es el que tiene poco, sino el que mucho desea”. – Lucio Anneo Séneca. 
   
 Los números, cuando son resultado de políticas públicas bien orientadas, hablan por sí solos. Este jueves, desde su conferencia matutina, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo dio a conocer una noticia que marca un hito para Veracruz: la disminución de la Pobreza Multidimensional en la entidad, que pasó del 51.7% en 2022 al 44.5% en 2024, de acuerdo con cifras del INEGI. “De 51 a 44 por ciento”, resumió la mandataria federal, destacando el impacto real que este avance implica para miles de familias veracruzanas que hoy cuentan con mejores condiciones de bienestar. 
 La cifra no es menor. Veracruz, históricamente golpeado por desigualdades estructurales y retos económicos profundos, muestra en este periodo una mejora sustancial que no solo refleja una estrategia social clara, sino también un acompañamiento institucional efectivo. La reducción de 7.2 puntos porcentuales no es casualidad: responde a un esfuerzo coordinado entre Federación y Estado, así como a políticas enfocadas en garantizar derechos básicos, impulsar la infraestructura social y mejorar el acceso a servicios fundamentales. 
 En este contexto, destaca el papel de la gobernadora Rocío Nahle García, quien ha mantenido una agenda intensa y un compromiso visible con los territorios. Prueba de ello fue su presencia la mañana de este mismo jueves en Poza Rica, encabezando desde el Centro de Comando y Control la reunión de seguimiento tras las intensas lluvias que azotaron la zona norte hace apenas 21 días. La emergencia aún demanda coordinación, y el gobierno estatal no suelta la mano a las comunidades afectadas. Esa presencia constante, ese ir al territorio, refleja una administración activa, atenta y cercana. 
 Pero el trabajo de la mandataria no se quedó ahí. También acudió a La Antigua para conmemorar los 500 años de la fundación de ese histórico municipio, reconociendo su legado y la riqueza cultural que representa para el estado. Porque gobernar no solo es administrar crisis, sino también exaltar la identidad y la memoria colectiva de un pueblo que ha sabido levantarse una y otra vez. 
 Los avances sociales siempre serán perfectibles, y la pobreza no se erradica de un día para otro. Sin embargo, la tendencia es clara: Veracruz transita por un camino de transformación real. Los resultados invitan al optimismo, pero también a la continuidad del esfuerzo. Hoy, más que nunca, las cifras confirman que cuando el gobierno se mantiene cercano, eficiente y con rumbo, los cambios sí se sienten en la vida de la gente. 
 El reto ahora es sostenerlo. Y, sobre todo, seguir avanzando. 
   
 Al tiempo. 
   
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