El combate al secuestro en Veracruz
Yamiri Rodríguez Madrid
La organización Alto al Secuestro, liderada por Isabel Miranda de Wallace, presentó su Reporte Nacional de Secuestro diciembre 2018-septiembre 2024 y en este coloca a Veracruz como el estado de mayor incidencia de este delito con 1073 casos. Junto con Estado de México, Ciudad de México, Puebla y Chihuahua, acumulamos el 44 por ciento de los 7 mil 14 secuestros que hubo en el sexenio morenista que terminó de Andrés Manuel López Obrador. Tan solo en septiembre pasado, la organización reportó 11 casos, superados solo por Sinaloa que tuvo 142. En contraparte, en Aguascalientes, Baja California Sur, Campeche, Colima, Durango, Michoacán, Querétaro y Yucatán, no hubo un solo caso.
Pero también es de destacar el trabajo que ha hecho la Fiscalía en el combate al secuestro. Todos los días, en el reporte de incidencias que envía, da cuenta de detenciones, vinculaciones a proceso y sentencias a secuestradores. Tan solo esta semana logró 54 años de prisión contra un sujeto que, en 2019, secuestró en Emiliano Zapata a su víctima. Un día antes vinculó a proceso a 5 sujetos en Tuxpan, quienes tenían una casa de seguridad. Y como estos, todos los días hay ejemplos de acciones, que son además respaldadas con campañas de prevención de secuestros virtuales y otro tipo de delitos.
Sin embargo, el secuestro sigue siendo un tema mayúsculo en la entidad veracruzana, uno de los principales retos que se presentará para quien ocupe la titularidad de la Secretaría de Seguridad Pública y, por supuesto, para la gobernadora Rocío Nahle García. Bajar la incidencia, el número de víctimas, debe ser la meta. Si otros estados pueden tener cero casos, ¿por qué nosotros no?
Aunque aun no se da a conocer el nombre de el o la próxima titular de la SSP, el hecho de que la próxima mandataria se haya reunido ya con Omar García Harfuch, titular de dicha dependencia a nivel federal, es muestra de que se busca seguir una estrategia conjunta para finalmente hacerle frente a la delincuencia y frenar así la desesperación, el baño de sangre y el luto que priva en muchos hogares del estado.
@YamiriRodriguez |