Luis Alberto Romero

 

Entre los aspirantes a las candidaturas de Morena para las presidencias municipales de Veracruz existe la percepción de que resulta más complicado lograr la postulación que ganar la contienda constitucional del 1 de junio de 2025.

En Morena parecen muy confiados; muchos creen que con la sola inercia de la marca del partido será suficiente para ganar las alcaldías. Al platicar con algunos aspirantes, se repite un lugar común: es más difícil ser candidato que enfrentar a los demás partidos en la contienda; según esta visión, el proceso electoral se percibe solo como un trámite.

Para entender este nivel de confianza, es necesario mirar las dos elecciones más recientes en Veracruz. En 2021, el antecedente inmediato de las presidencias municipales, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ganó 18 alcaldías en solitario, y otras 69 en coalición con el PT y el Verde. Además, en 16 municipios los partidos aliados lograron derrotar a la oposición.

En total, durante esa elección, los partidos que conforman la Cuarta Transformación obtuvieron victorias en 93 municipios. La mayoría de los ayuntamientos más poblados de Veracruz quedaron bajo el control de la alianza oficialista, como Tuxpan, Poza Rica, Papantla, Martínez de la Torre, Xalapa, Córdoba, Coatzacoalcos y Minatitlán, entre otros.

En ese mismo proceso, pero en la contienda por las diputaciones locales, la oposición solo ganó en cuatro distritos, mientras que 26 más quedaron en manos de Morena y sus aliados.

Tres años después, en las elecciones de 2024, la 4T reafirmó su hegemonía política. En la contienda por la gubernatura, Rocío Nahle casi duplicó la votación de la coalición opositora; mientras que en la elección de diputados locales, la suma de PAN, PRD y PRI alcanzó apenas el 27%, frente al 58% de la alianza Morena-PVEM-PT.

Si en 2021 la oposición fue derrotada con facilidad en las elecciones locales, en 2024 PAN, PRD y PRI fueron aplastados, ganando solo en un distrito: Boca del Río, de los 30 en disputa. Esta tendencia de votación favorable a Morena en los últimos años tiene muy confiados a los aspirantes de dicho partido para las candidaturas a las presidencias municipales.

Sin embargo, la historia reciente nos muestra que no hay tendencias irreversibles. En 2017, durante las elecciones para las alcaldías, Acción Nacional (PAN) ganó en la mayoría de los municipios, logrando la victoria en 112. Un año después, en la contienda por la gubernatura, su candidato, Miguel Ángel Yunes Márquez, fue derrotado por Cuitláhuac García, del Morena.

En Morena son conscientes de este riesgo y, aunque vienen de una victoria contundente, saben que no deben confiarse. A pesar de los resultados electorales recientes, de una oposición desarticulada y de una tendencia muy favorable, la historia les recuerda que no deben caer en el conformismo político.

@luisromero85