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Actualizado: 2021-04-12 |
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Astrolabio Pol�tico
Socavar a la verdadera oposici�n
Por: Luis Ram�rez Baqueiro
�Tem�a al odio, hasta que me di cuenta que no es otra cosa m�s que ignorancia.� � Ernest Hemingway.
En toda democracia de cualquier parte del mundo, la oposici�n se conforma por ese grupo de mujeres y hombres que disiente de lo que el r�gimen considera como correcto.
La oposici�n, es en muchos de los casos una mayor�a, que desfragmentada no pudo alcanzar el poder a trav�s del voto democr�tico.
Bajo ese precepto, la oposici�n no es, ni debe ser vista nunca como "los derrotados", pues su diferendo ideol�gico sirve siempre de contrapeso para el ejercicio democr�tico del poder.
Lastimosamente en estos tiempos, la oposici�n �que, por cierto, pareciera estar ausente- ha sido satanizada por el m�ximo tlatoani redentor, quien, en una m�s de sus m�ticas verborreas argumentativas, la califica de la �moralmente derrotada�, algo que ning�n pol�tico de primer mundo, se atrever�a siquiera a pronunciar.
Pero en el M�xico surrealista y a veces en extremo bizarro, las y los mexicanos observan sigilosos el desarrollo de las campa�as electorales, mismas que han sido marcadas desde el dictado presidencial como en extremo violentas, divisorias, cargadas de odio y apat�a, como resultado de esa absurda e innecesaria carga moralizante que impone el presidente L�pez.
Una moral, que, sin fundamento y argumentos, pretende imponerles a las y los mexicanos, bajo el principio de ac� todo est� bien, enfrente es donde est� la porquer�a.
Por simple l�gica, la moral presidencial, no aprobar�a ning�n tamiz o filtro, dentro de esa dial�ctica reformadora que se vende como nueva religi�n para los miles de babeantes seguidores, que repiten los falaces argumentos, sin razonamiento alguno.
Pero ante ese escenario la verdadera oposici�n �sociedad civil- se moviliza e intenta construir desde la trinchera lo que habr� de ser el asalto final dentro de esta guerra intestina convertida en democracia.
As� el �nico partido pol�tico que hasta ahora ha alzado la voz y se ha intentado comportar como oposici�n de a de veras resulta ser el Partido de la Revoluci�n Democr�tica (PRD).
Para muchos, un partido al que califican de cascar�n, pero que al menos en el estado de Veracruz ha sido un verdadero dolor de cabeza para el gobierno reformador de la 4T.
Su combativa lucha argumentativa, con fundamentos y propuesta, ha significado un malestar que se intenta acallar con toda la fuerza del estado.
As� acumula por desgracia en su haber, una alcaldesa asesinada, Florisel R�os Delf�n �Jamapa-; un ex presidente y ex secretario de Gobierno �preso pol�tico- Rogelio Franco Cast�n acusado de presunto delito inventado de �ultrajes a la autoridad� �porque quien en su sano juicio puede asegurar que un polic�a ministerial armado hasta los dientes pueda ser ultrajado- y encarcelado desde hace un mes en el Penal de la Toma; un candidato a la presidencia Municipal de Tihuatl�n, Gregorio G�mez Mart�nez, sustra�do, secuestrado y acusado de presuntos delitos que a todas luces �con v�deos de la sustracci�n- muestran el intento por acabar con esa oposici�n.
A la lista perredista se acumulan much�simos m�s agravios, amenazas e intimidaciones, mismos que han sido en todo momento denunciados por su presidente Sergio Cadena Mart�nez.
El poder persecutorio impuesto desde el Palacio Virreinal de la Avenida Enr�quez en Xalapa no ha cejado ante el inminente terror que les representa que esa oposici�n siga diciendo la verdad de lo que ocurre y sucede en Veracruz, sin darse cuenta que todas esas acciones son afrentas directas a la verdadera oposici�n �sociedad civil- que los observa y que registra su proceder.
El intento por socavar a la verdadera oposici�n resultar� inmensamente proporcional al da�o que desde el poder han causado quienes hoy se dicen gobierno.
Al tiempo.
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