La sumisi�n incondicional del gobierno y el silencio c�mplice de la CNDH |
|
|
Actualizado: 2020-01-23 |
|
FELIPE DE JES�S FERN�NDEZ BASILIO
DESDE A JANELA
La sumisi�n incondicional del gobierno y el silencio c�mplice de la CNDH
En otras ocasiones hemos tratado en este espacio el complicado y a la vez triste tema de las migraciones y tambi�n del papel que hist�ricamente ha tenido M�xico en las mismas, el cual generalmente ha sido de acogida cuando el destino final de las mismas es el pa�s y de apoyo y solidaridad sobre todo por parte de la sociedad civil organizada cuando los migrantes solo est�n de paso.
Mas ahora en M�xico tenemos un gobierno que se ha destacado por ser mentiroso y hacer creer una cosa para despu�s realizar todo lo contrario a lo prometido y en este caso tenemos que en campa�a y a inicios de la presente administraci�n se dijo tanto por parte del presidente como de los secretarios de gobernaci�n y relaciones exteriores que siempre se iban a respetar los derechos humanos de los migrantes durante su estancia en M�xico y que adem�s se iban a crear empleos para que los que gustasen pudieran quedarse en M�xico.
Sin embargo, las circunstancias para los migrantes dieron un dram�tico giro cuando el mismo gobierno mentiroso cuyo jefe prometi� en campa�a que no iba a permitir que un gobierno extranjero dirigiera las pol�ticas del gobierno mexicano y que iba a ser muy exigente en el respeto a la soberan�a nacional, sucumbi� al primer tronido de dedos hecho desde Washington y dio un giro de 180 grados en la pol�tica migratoria, ordenando la persecuci�n y posterior deportaci�n de la mayor cantidad de migrantes que sea posible.
Llegando su servilismo hacia el gobierno norteamericano hasta el grado de dedicar a la mayor parte de las fuerzas del orden federales para cazar migrantes, cosa que adem�s hace en un pa�s azotado terriblemente por el crimen, y as� convertir a M�xico en la verdadera frontera sur de Estados Unidos sin tener en la materia nada a cambio, porque los nacionales mexicanos siguen teniendo las mismas complicaciones que los dem�s para entrar a Estados Unidos.
Es decir, el gobierno de L�pez se someti� incondicionalmente al de los Estados Unidos y as� dedica todos sus esfuerzos para hacer realidad la promesa de Trump, quien como vemos a diferencia de L�pez s� cumple sus promesas y lo hace por el medio que sea, de crear un muro infranqueable en el sur y que �ste sea costeado por M�xico.
Y es que en este caso y para decir las cosas como son M�xico no es una comparsa de Estados Unidos, sino que es quien costea y lleva a cabo el trabajo que debieran de hacer los guarda fronteras norteamericanos y para ello dedica un alt�simo porcentaje tanto de presupuesto como de elementos que en teor�a debieran de ser destinados para la prevenci�n y persecuci�n de delitos y no para hacer lo que le corresponde a terceros pa�ses; ya no hay que olvidar que quien no quiere a los inmigrantes es Estados Unidos y no M�xico y por l�gica elemental esa tarea le corresponde a Estados Unidos.
Y lo peor de todo es que esa engorrosa y nada productiva tarea se hace sin obtener una ventaja para los mexicanos.
Cosa que s� ocurre con otros pa�ses en otras latitudes, siendo un ejemplo el caso de Portugal, Espa�a, Italia o Grecia que al igual que M�xico en alg�n momento necesitaron contener las migraciones ilegales (y lo siguen haciendo) hacia pa�ses que eran m�s ricos como los del norte y centro de Europa pero que fueron recompensadas integr�ndolas en la Uni�n europea y dando pleno derecho de tr�nsito a sus nacionales al interior de �sta.
Cabe hacer la aclaraci�n que la integraci�n a la UE de estos pa�ses no fue por ese solo motivo pero que hacen esa tarea con m�s dignidad que M�xico, porque sus ciudadanos s� pueden moverse a placer por el continente y en caso contrario ser�a muy dif�cil que la hicieran, ya que seguramente sus gobiernos ser�an fuertemente censurados por su ciudadan�a.
Mas como ya dijimos, aqu� y ahora las cosas son totalmente diferentes, puesto que el gobierno mexicano que ofrec�a ser un tigre para defender su soberan�a acab� siendo un perrito faldero de los Estados Unidos, el cual ejecuta a la perfecci�n todas las maromas que Trump le ordena.
Y lo hace tan a la perfecci�n que ni siquiera la encargada de velar por los derechos humanos de toda persona que se encuentre en territorio nacional se atreve a decir algo sobre la violencia policial a la que son sujetos los que intentan entrar, transitar o incluso salir del pa�s por el norte, cuando su elemental obligaci�n es hacer los extra�amientos que sean necesarios a las autoridades competentes para que cesen en sus actos ilegales mas como la se�ora Rosario Piedra no es m�s que una t�tere del gobierno, su boca callada es el mejor ejemplo de c�mo esta administraci�n se encuentra plegada incondicionalmente a los deseos de Donald Trump.
[email protected]
Twitter: @FelipeFBasilio
|
|
|
Desde a Janela
Felipe de Jesús Fernández Basilio |
|
|