Veracruz, Ver.- (AVC) La Diócesis de Veracruz hizo un llamado a los jerarcas católicos a celebrar la Semana Santa en el interior de las parroquias, a puerta cerrada, con el apoyo de los medios de comunicación, y sin presencia del pueblo, debido a las medidas adoptadas a nivel nacional para contener el contagio del Covid-19. Mediante un comunicado, el obispo de la Diócesis, Carlos Briseño Arch, indicó que el próximo 3 de abril, conocido como “Viernes de Dolores”, los obispos de México, convocaron a todo el pueblo cristiano a realizar una Jornada Nacional Penitencial, realizar un ayuno y una hora santa penitencial, como acto de contrición. La celebración del “Domingo de Ramos”, se llevará a cabo en el interior del templo católico, de igual manera la “Misa Crismal” y el jueves santo se omitirá el lavatorio de pies, que es algo facultativo. Al final de la misa, en la Cena del Señor, se omitirá la procesión y se concederá excepcionalmente a los presbíteros la facultad de celebrar la misa, sin la presencia del pueblo, suprimiendo todo acto de religiosidad popular. El “Viernes Santo” se orará por quienes sufren a causa del coronavirus, para que experimenten pronta recuperación y se pedirá por los médicos, enfermeras y quienes cuidan a los enfermos para que Dios les conceda misericordia y den testimonio de caridad. También se orará por quienes han perdido la vida como consecuencia del coronavirus, para que el Padre de la misericordia y el Dios de todo consuelo, los admita en el lugar de luz y paz, así también por sus familiares, para que encuentren en Dios fortaleza y consuelo. Por último para la Vigilia Pascual del 11 de abril, se celebrará en la parroquia y el bautismo de los catecúmenos se realizará en una fecha posterior. “Dios todopoderoso y eterno, tú que quisiste que tu hijo único venciera la muerte y entrara victorioso en el cielo, concede a tus hijos que han muerto a causa de esta pandemia, que, venciendo también la muerte, puedan contemplarte a ti, creador y redentor, por toda la eternidad, por Jesucristo nuestro señor”. El religioso señaló que ante el crecimiento de la pandemia, en su fase 2, se invita a prevenirse física, pastoral y económicamente, pues “no sabemos cuánto durará ni las consecuencias, y es mejor prepararse para el peor escenario”.
|