Orizaba, Ver.- (AVC) La visita del director general del ISSSTE, Martí Batres Guadarrama, a la Clínica-Hospital de Orizaba derivó en una serie de reclamos de derechohabientes por deficiencias en el servicio, que incluyeron falta de medicamentos, maltrato y retrasos en la atención.

 Lo que comenzó como la entrega de credenciales permanentes a jubilados y pensionados cambió cuando una maestra jubilada tomó la palabra en el auditorio y exigió explicaciones por el cierre del consultorio periférico de Ciudad Mendoza. Su intervención expuso el impacto de la clausura para la población de ese municipio y zonas cercanas.

 La docente relató que adultos mayores deben desplazarse hasta Orizaba para recibir atención médica, a pesar de que muchos requieren apoyos para movilidad. Describió que las personas llegan desde las 4:00 de la mañana y pueden esperar hasta siete u ocho horas sin saber si serán atendidas.

 Ante la presión, Batres escuchó la intervención y afirmó que el consultorio de Ciudad Mendoza será reconstruido antes de que concluya la administración federal, pero no ofreció una fecha concreta. 

Tras el primer reclamo, más derechohabientes se acercaron al funcionario para exponer problemas recurrentes en la clínica: falta de medicamentos, retrasos en traslados médicos, extravío de expedientes y tratos inadecuados. Algunos señalamientos fueron dirigidos al propio director del hospital, Rogelio Roberto Guerrero Bustamante.

Los usuarios afirmaron que estas deficiencias afectan la continuidad de sus tratamientos, complican diagnósticos y dificultan la atención de personas mayores o con enfermedades crónicas. Subrayaron que la saturación diaria incrementa las horas de espera.

Batres escuchó cada intervención y aseguró que la institución revisará los casos planteados durante el recorrido, aunque no detalló medidas inmediatas para atender los señalamientos.

Durante la visita, una reportera intentó obtener detalles sobre la reconstrucción del consultorio y la construcción de un quirófano para la clínica. Un integrante del equipo del ISSSTE la increpó y le gritó que “los medios sólo estaban ahí para confrontar”, lo que provocó tensión entre asistentes y prensa.

Pese al incidente, la reportera logró cuestionar directamente a Batres unos momentos después. El funcionario confirmó que tanto la reconstrucción del consultorio de Ciudad Mendoza como la edificación de un nuevo quirófano están programadas para 2026.

Tras la confirmación, Batres continuó su recorrido por el hospital acompañado de personal directivo, en medio de solicitudes de información y nuevos planteamientos por parte de derechohabientes. 

La visita del director del ISSSTE a Orizaba expuso problemas persistentes en la atención y la infraestructura de la clínica. Mientras las obras anunciadas se programan para 2026, derechohabientes continúan demandando mejoras inmediatas en servicios esenciales.