| La democracia da y quita |
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Actualizado: 2020-11-12 |
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FELIPE DE JES�S FERN�NDEZ BASILIO
DESDE A JANELA
La democracia da y quita
Como era de esperarse y al avanzar los conteos en los estados norteamericanos en los que hasta la semana pasada no se hab�an concluido, la distancia entre el candidato dem�crata y el presidente republicano se ampli� un poco m�s y aunque no se dio la paliza esperada antes de las elecciones, s� fue posible declarar vencedor a Biden por obtener los os necesarios para ser presidente de los Estados Unidos a partir del pr�ximo 20 de enero.
Lo anterior suceder� pese a que los que se niegan a desconocer la derrota de Trump sostienen que a fuerza de recursos legales van a cambiar los resultados de la elecci�n, ya que aunque alegan la existencia de fraude, en realidad no han presentado alguna prueba que lo demuestre y aunque el camino postelectoral parece largo, en realidad no es m�s que ceremonial y es que aunque parezca que todav�a pueden surgir algunas trabas tanto en los recuentos como en la integraci�n misma de los delegados al Colegio Electoral, la realidad es que siempre ratifican lo que ya est� votado, esa es la tradici�n y Estados Unidos es quiz� uno de los pa�ses m�s tradicionalistas del mundo.
Otra cosa que hay que resaltar es que los partidarios de Trump, incluido el servil presidente mexicano, dicen que los medios de comunicaci�n no son autoridades electorales y por ello no se puede reconocer como ganador al que proyectan, argumento que choca tanto con la frialdad de las matem�ticas como con la tradici�n que ya se ha mencionado.
Para empezar esa determinaci�n o proyecci�n como le llaman en aquel pa�s no es hecha por los medios de comunicaci�n arbitrariamente sino que se basa en t�cnicas matem�ticas y estad�sticas que emiten las autoridades electorales, algo similar a lo que aqu� conocemos como el PREP o los conteos r�pidos, es decir se trata de informaci�n sustentada por los conteos que se llevan a cabo en las propias casillas electorales y solo cuando hay una certeza de que el conteo final no va a variar es que se declara un ganador en cada estado pero cuando la elecci�n est� re�ida, ese estado se reserva para la siguiente fase del conteo e incluso hay estados que ordenan un segundo conteo manual de todos los votos cuando la diferencia es m�nima entre uno y otro candidato.
Pero al final los datos que arrojan los conteos preliminares y los definitivos coinciden y ese segundo conteo es solo para que no quede alguna duda del resultado cuando es muy apretado, tan es as� que aqu� en M�xico siempre gana el candidato que determin� el PREP y lo mismo sucede en todos los pa�ses que son democr�ticos.
Pero m�s all� de todo esto, la lecci�n que nos dejan estas elecciones norteamericanas es que cuando la democracia es verdaderamente fuerte da y quita sin contemplaciones y as� como un d�a el pueblo encumbra con aclamaciones a un personaje, al otro lo puede sacar del cargo con la misma autoridad con la que lo nombr� y el caso m�s c�lebre de lo anterior lo vivi� Winston Churchill quien en los a�os m�s aciagos de la guerra fue aclamado y apoyado por el pueblo brit�nico como un gobernante apto para conducir al pa�s en esas circunstancias pero apenas se rindieron los alemanes lo sacaron del poder y ni siquiera pudo disfrutar de la victoria, es decir, lo apoyaron mientras hab�a hostilidades pero cuando estas cesaron pensaron que era mejor Clement Attlee para iniciar la posguerra.
Pues algo parecido sucedi� con Trump, muchos creyeron en su discurso lleno de odio pero que a la vez generaba expectativas de recuperar empleos en ciudades que est�n muy deca�das como Detroit, mas vieron que no se recuperaban los empleos como se hab�a prometido y que por otra parte el pa�s estaba cayendo en una espiral de odio como no se hab�a visto en mucho tiempo y de una manera mucho m�s amplia que los odios tradicionales entre los norteamericano, porque ya no era solo de blancos contra negros o latinos, sino que ahora la divisi�n y el enfrentamiento se da incluso al interior de las familias, ya que la estrategia principal de los l�deres neofascistas como Trump es sembrar el odio entre la poblaci�n provocando el fanatismo tanto entre sus seguidores como entre sus contrarios.
Y ya que hablamos de neofascistas, curiosamente el clan de gobernantes de esa facci�n que existe en el mundo y del que por desgracia M�xico es parte, se niega a reconocer el resultado electoral y alegan tecnicismos que no existen para escatimar la victoria del dem�crata, mas esa reacci�n es bastante previsible ya que es muy com�n cuando alguien se ve amenazado por un evento externo y el caso que ejemplifica a la perfecci�n lo anterior es el de la revoluci�n francesa, ya que cuando al principio el pueblo se amotina y limita al rey para despu�s deponerlo, las dem�s monarqu�as absolutistas europeas organizan coaliciones para invadir Francia y terminar con esa revuelta antes de que se contagiara a sus propios pa�ses, como d�cadas despu�s suceder�a.
Por ello no es extra�o que aqu� en M�xico, L�pez evite reconocer el resultado electoral en el pa�s vecino, ya que �ste es toda una llamada de atenci�n respecto a lo que a �l y a su proyecto le puede suceder cuando el pueblo nuevamente sea convocado a las urnas y m�s cuando es demasiado notorio que no ha hecho nada por cumplir su principal promesa de campa�a que es el combate a la corrupci�n, sino que por el contrario en su gobierno la corrupci�n se ha cultivado al nivel m�s descarado de toda la historia de M�xico.
Y tan descarada es que los casos de enriquecimiento de funcionarios son extremadamente notorios y burdos como sucede con Bartlett, Irma Er�ndira Sandoval y su marido o en muchos gobiernos locales emanados de sus filas y que el presidente en lugar siquiera de censurarlos los disculpa de una manera muy desvergonzada y la perla de la corrupci�n del gobierno actual la tiene nuestra muy citada �Frau M�ller�, quien se vuelve investigadora del Conacyt sin cumplir con todos los requisitos para serlo cuando su esposo es presidente de la rep�blica; reza el dicho popular que �hay que ser puercos pero no trompudos� m�s estos de la autollamada cuarta transformaci�n son �Trompud�simos!.
Y de lo anterior el pueblo que los eligi� se va dando cuenta, porque es muy notorio que, en lugar de combatir la corrupci�n, la est�n fomentando m�s, pero para s� mismos y eso aunado a todos los errores y cuentos que se han dicho y hecho en lo que llevamos de la actual administraci�n van pesando en el �nimo de la poblaci�n.
Por ello es importante defender nuestra democracia y la mejor manera de hacerlo es saliendo a votar el a�o que entra y limitar el poder que la administraci�n actual detenta y as� demostrar que la democracia da y quita con la misma autoridad.
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Twitter: @FelipeFBasilio
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