| �D�nde est� mi abogado? |
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Actualizado: 2020-07-09 |
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FELIPE DE JES�S FERN�NDEZ BASILIO
DESDE A JANELA
�D�nde est� mi abogado?
Esta pregunta surge ahora que pr�cticamente est� parada la actividad judicial y que por consiguiente todos los problemas planteados ante ella se encuentran detenidos como si fuera un largu�simo fin de semana en el cual las injusticias prevalecen y la aplicaci�n de la ley es letra muerta, ya que todos esos bellos derechos que se encuentran escritos en la constituci�n carecen de aplicaci�n y por lo tanto es como si no existieran.
En la entrega pasada reflexionamos acerca del fallo del Estado en su rama judicial y tambi�n sobre el nulo inter�s que tienen en volver a trabajar pese a que est�n cobrando sin resolver un solo asunto.
Por ello ahora toca tratar sobre los otros actores fundamentales para la impartici�n de justicia y esos precisamente somos los abogados y es que tan solo la palabra abogado deriva de la expresi�n latina �ad auxilium vocatus� que en castellano significa �el llamado para auxiliar� por lo que se denomina como abogados a los profesionistas que son llamados en auxilio, tanto para prevenir como para solucionar conflictos legales.
Por lo tanto, no cualquiera que estudia leyes es un abogado sino s�lo lo es aquel que se dedica a ayudar a otros en temas jur�dicos, principalmente en la defensa de sus derechos que han sido vulnerados por otra persona o por el Estado.
Ahora bien, si esa es la funci�n del abogado entonces una vez que acude en auxilio de quien lo solicita, su obligaci�n es defender los derechos de quien lo requiere tanto en los tribunales como fuera de ellos y aun por sobre ellos, caso que aplica en situaciones como en la que ahora vivimos en la que �stos no quieren trabajar.
Por ello es de llamar la atenci�n el pasmo y la resignaci�n que manifiestan muchos abogados ante la irresponsable inactividad judicial, porque no hay otra manera de llamar al mantener cerrados los juzgados y parada su actividad por tant�simo tiempo so pretexto de que al abrir sus instalaciones ponen en peligro de contagio a mucha gente; argumento que es rid�culo y suena m�s a pretexto para tener vacaciones pagadas ya que les aseguro que cualquier supermercado en quincena o en horas pico tiene m�s gente adentro que un juzgado y la vida sigue.
Pero a�n m�s llama la atenci�n el mensaje que algunas �barras� de abogados env�an a sus agremiados y a la sociedad en general diciendo que esta es una contingencia casi apocal�ptica y que no hay nada que se pueda hacer m�s que permanecer encerrados y de ser posible estudiando para esperar tiempos mejores y entre todas estas opiniones encontr� una perla.
Resulta que un l�der, tampoco encuentro otra manera de llamarlo, de una de las tantas �barras y colegios� de abogados que hay en el estado de Veracruz, el Sr. Vito Lozano respondiendo a los abogados inconformes con la situaci�n, dijo que las medidas tomadas por el Tribunal Superior de Justicia del Estado eran acertadas debido a la pandemia y que recomendaba a los abogados mantenerse en cuarentena y dejar por la paz los asuntos civiles que est�n detenidos y mejor dedicarse a los penales que poco avanzan o de plano ponerse a estudiar y actualizarse.
Esas declaraciones tiran por la borda el objetivo de la profesi�n, es como si se le dijera a una mujer que sufre de violencia familiar por parte de su esposo que ahorita no se puede hacer mucho y que mejor mientras dure la cuarentena pruebe con comportarse de otra manera y as� tal vez le pegue un poco menos o que se le diga a alguien que cay� preso y que se va a mantener ah� porque la prisi�n preventiva que le dictaron va a durar todo su proceso, el cual va estar parado lo que dure la cuarentena, que mejor le diga a su carcelero que le permita tener un pasatiempo, porque no hay de otra mientras est� el peligro de contagio.
Pues no Don Vito, eso no es ser abogado y por ello es que en este pa�s no funcionan las �barras y colegios� de abogados, ya que est�n a las �rdenes del Estado y no velan por los intereses de sus representados ni mucho menos por los de quienes acuden a ellos, los justiciables.
Con esa manera de pensar �Qu� abogado que pretenda cumplir con su profesi�n va a querer acercarse a una organizaci�n de esas?, ya que si por ejemplo tiene como problema el que se ator� una apelaci�n penal, porque a los se�ores magistrados que trabajan en el Tribunal Superior de Justicia se les ocurri� no trabajar por lo que dure la ya mal llamada cuarentena, y en lugar de presionar al tribunal le dicen que mejor se espere o se vaya a tratar de coyotear en la fiscal�a por lo que dure vigente la �excelente medida� tomada por las autoridades judiciales y mientras quien depende de esa apelaci�n vive un infierno por tiempo indefinido.
Esas actitudes me recuerdan que, contrastando la definici�n de abogado que di al principio de este texto, una colega coment� alguna vez que los abogados eran como los mercenarios �ya que ponen su espada al servicio de quien los contrata�, frase que de acuerdo al significado de la palabra mercenario bien se completa diciendo �y que no se comprometen m�s que con el dinero que les pagan� y ese pensamiento es el que tiene el mencionado l�der de un colegio de abogados, ya que pens� muy bien en adular a la presidente del tribunal, medianamente bien en dar consejos a sus miembros para no quedarse sin ingresos (al parecer lo que importa) y terriblemente mal, porque ni mencion� a quienes son la esencia de la profesi�n, los representados.
Concluyo diciendo que el buen abogado a estas alturas del partido no solo tiene que seguir asesorando a sus representados como ordinariamente lo hace, sino que debe adem�s de tratar de romper con ingenio el cerco sanitario que hoy por hoy ya es rid�culo y en la medida de lo posible ir arrancando acuerdos y hasta resoluciones a los tribunales, porque m�s all� de cualquier situaci�n por imprevista que esta sea, el compromiso que da sentido a la profesi�n del abogado es exigir que se cumplan los derechos de quienes acuden a �l.
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Twitter: @FelipeFBasilio
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Desde a Janela
Felipe de Jes�s Fern�ndez Basilio |
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