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Viernes 19 de abril de 2024
El �tal�n de Aquiles� del lopezobradorismo

Actualizado: 2018-05-16
R�brica

El �tal�n de Aquiles� del lopezobradorismo

Por Aurelio Contreras Moreno

Desde hace varios a�os, el discurso pol�tico de Andr�s Manuel L�pez Obrador ha girado sobre el eje del combate y erradicaci�n de la corrupci�n, mientras al mismo tiempo abre las puertas de su proyecto a aquellos que -aun viniendo de los partidos y los grupos de poder contra los que dice luchar- se sumen al mismo para apoyarlo incondicionalmente.
De esta forma, mientras el lopezobradorismo habla de honestidad, de principios y de �tica pol�tica, recoge cascajo de todas partes y en sus filas incluye a verdaderos impresentables, a personajes con una reputaci�n detestable, o a francos adversarios del pensamiento de izquierda que dice enarbolar, y que cada vez est� m�s diluido.
Tal �flexibilidad� pol�tica en aras de llegar a cualquier precio a la Presidencia de la Rep�blica ha tenido consecuencias que �l y su movimiento han pagado y siguen pagando, a un alto costo. Aunque el enorme hartazgo de la poblaci�n hacia la clase pol�tica que ha gobernado el pa�s las �ltimas d�cadas y que ve en Andr�s Manuel y su partido una �ltima v�a de escape, oculta moment�neamente las secuelas.
El movimiento de L�pez Obrador ha dejado pasar lo mismo a ex priistas de pasado repugnante como Manuel Bartlett que a representantes de la ultraderecha m�s radical, como sus �aliados� de Encuentro Social o su m�s reciente �adquisici�n�, el ex dirigente nacional del PAN y furibundo conservador homof�bico y antiabortista Manuel Espino Barrientos. Ni qu� decir de su intento por emular a Cal�gula haciendo candidato a gobernador de Morelos al ex futbolista Cuauht�moc Blanco.
En el pecado ha llevado la penitencia. Al no establecer m�s filtro que el juramento de �fidelidad� al proyecto y la aceptaci�n de que las decisiones de su l�der son incuestionables, a las candidaturas de Morena �y antes, a las del PRD- se han metido aut�nticos mercenarios de la pol�tica, zopilotes de los cargos p�blicos que una vez que los obtienen, con la mano en la cintura han pactado con sus adversarios, le han dado la espalda al �movimiento� e incluso han aceptado alquilarse como �pati�os� para atacarlo.
Lo sucedido en el Congreso del Estado de Veracruz con los diputados locales que llegaron bajo las siglas de Morena en noviembre de 2016 es una clara muestra de esa afirmaci�n. Sebasti�n Arellano, Eva Cadena, Miriam Gonz�lez Sheridan y Nicol�s de la Cruz, todos integrantes originales de esa bancada, han desertado tras pactar de manera descarada con el yunismo panista, que los ha cooptado de diferentes maneras. Y que una vez que dejen de serle �tiles, tambi�n los desechar�.
L�pez Obrador pide ahora a sus simpatizantes que voten en cascada por todos los candidatos de la coalici�n Morena-PT-PES a todos los cargos de representaci�n popular que est�n en juego, federales y estatales, cuando hay evidencia de que en muchos casos fueron postulados advenedizos que se unieron a su movimiento �nicamente ante la alta posibilidad de hacerse de un �hueso�, impulsados por eso que se ha hecho llamar �el efecto Andr�s Manuel�. �Qui�n le garantiza que no lo van a traicionar tambi�n, una vez que est�n instalados en curules, alcald�as y hasta gubernaturas?
Los �caballos de Troya� que dejaron entrar s�lo est�n esperando para atacar exactamente en donde el lopezobradorismo ha mostrado tener su �tal�n de Aquiles�. No ser� la primera vez.

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