| Elecciones: antipriismo vs. antipejismo |
|
|
|
Actualizado: 2018-04-17 |
|
|
De razones y pasiones
Elecciones: antipriismo vs. antipejismo
Rafael P�rez C�rdenas
Vivir en M�xico no es f�cil. Tenemos una cultura que cultiva la desigualdad, la contradicci�n y el enojo. A cualquier nivel �social, pol�tico, econ�mico y hasta familiar- tenemos muy claro lo que nos molesta pero no atinamos a encontrar las decisiones adecuadas para resolverlo. Asumimos que los fallos est�n en las otras personas y no en nosotros mismos, lo que nos hace sentir a veces incomprendidos en nuestra sinraz�n.
Y as� estamos construyendo nuestra sociedad y nuestras instituciones: a partir de lo que rechazamos y no de lo que necesitamos. Las consecuencias de esta cultura donde prevalece un encolerizado pesimismo est�n arrastrando a esta elecci�n presidencial.
Hasta ahora, las encuestas sobre la preferencia electoral muestran un escenario de alta competencia, donde Andr�s Manuel L�pez Obrador mantiene una ventaja considerable, aunque no definitiva. Sin embargo, estas tendencias son resultado en buena parte del enojo y no de la raz�n; y en esta l�gica, la competencia se centrar� tarde o temprano en s�lo dos candidatos: Jos� Antonio Meade y Andr�s Manuel L�pez Obrador.
Para decirlo claro: el triunfo de Jos� Antonio Meade o de Andr�s Manuel L�pez Obrador depende en buena medida de c�mo sepan administrar y resolver el anti voto, es decir, el antipriismo y el antilopezobradorismo que se empiezan a apoderar de las redes y las conciencias, conforme avanzan las campa�as.
Las tendencias muestran poco de las capacidades y habilidades de los candidatos; son m�s bien el reflejo de lo que enoja a los electorales. Y eso explica la ventaja de L�pez Obrador respecto de Jos� Antonio Meade, y al mismo tiempo, abre la posibilidad de que esas tendencias cambien. Me explico.
As� como hay un antipriismo inobjetable, tambi�n hay un antilopezobradorismo que sigue creciendo. En efecto, las tendencias marcan que alrededor del 40 por ciento de los electores ha dicho que podr�a votar por L�pez Obrador, pero al mismo tiempo, hay un 60 por ciento que se muestra convencido de que no votar� por �l. Y que est�n haciendo su chamba para evitar que el tabasque�o llegue a la presidencia.
Del antipriismo hay poco qu� decir. La gente tiene razones suficientes para rechazar al PRI como opci�n pol�tica y en consecuencia, tener reservas de un candidato que lo representa pero que nunca ha militado en �l. Jos� Antonio Meade lo tiene claro y sus esfuerzos est�n enfocados a marcar esa diferencia.
Del antilopezabradorismo. A estas alturas del partido es muy dif�cil que Andr�s Manuel ofrezca una caracter�stica nueva y atractiva para el electorado; pareciera que su labor est� en administrar su ventaja, pero sobre todo, no hacer enojar al elector, sentimiento que al parecer va a incidir en la elecci�n de julio. Tal vez AMLO no ha hecho enojar a muchos mexicanos, pero empieza a sembrar dudas respecto de amplios sectores apol�ticos que no profesan preferencia partidista.
El encontronazo de ayer con Carlos Slim por el tema del nuevo aeropuerto volvi� a mostrar al L�pez Obrador de siempre: intolerante ante los argumentos �el magnate ni siquiera lo critic� a �l, sino que habl� de las ventajas del NACM-, obcecado y proclive a frases y lugares comunes que lo salvan de tener que responder con inteligencia. Andr�s Manuel est� reviviendo enojos con la clase pol�tica empresarial; su paciencia y pragmatismo son un polvor�n.
En el caso de Veracruz, hasta ahora ning�n candidato del PRI ha tenido la habilidad de contrarrestar el creciente antipriismo �en realidad un antiduartismo- que empoderada a cualquier desconocido, como ha sucedido con los candidatos de Morena en las elecciones pasadas. Se trata de un voto de castigo a las pasadas administraciones estatales capaz de decidir elecciones, como sucedi� en la sucesi�n gubernamental de 2016.
Y esa pesada losa sigue sobre los hombros del candidato Pepe Yunes. Al final del d�a, es muy probable que Pepe sea calificado por sus v�nculos �a trav�s de sus colaboradores y quienes hoy son candidatos- con los gobiernos pasados y no por sus habilidades y conocimientos en administraci�n p�blica. Del pleito de tripas, hablamos en el estribo.
Eso explica n�tidamente porqu� sigue en el tercer lugar de las encuestas, donde podr�a quedarse definitivamente. Y por eso es que la disputa est� entre Miguel �ngel y Cuitl�huac, quienes no se han tenido que esforzar mucho para sacar al PRI de la contienda. La gente sigue enojada por el desfalco duartista y no hay estrategia para acotarlo.
Hasta ahora, las encuestas muestran m�s el enojo que la preferencia.
Las del estribo�
1. Tan ocupada estaba la dirigencia priista en soltar a sus demonios para satanizar a V�a Veracruzana y a sus integrantes, que no se dieron cuenta de la rebeli�n de la granja. Su dirigente estatal de la CTM, la Presidenta de la fundaci�n Colosio y hasta �su vocero! han amenazado al PRI con retirar su apoyo, renunciar o hasta ir a tribunales porque no les favorecieron las candidaturas. �Qu� no era de eso de lo que acusaban a V�a? Ternuritas.
2. A �la negra�, como le dec�amos a Martha Meza algunos de sus amigos, la conoc� en 1986, cuando lleg� de Monterrey a trabajar en El Sol Veracruzano. De car�cter fuerte �a veces con raz�n o otras sin ella-, fue el referente de muchas generaciones de periodistas en Veracruz. Era disciplinada y tenaz, con un olfato period�stico como pocos. Hoy ha tenido que ausentarse para que muchos record�ramos sus m�ritos y volvi�ramos a ser sus amigos. As� de absurda suele ser la vida.
|
|
|
