| La nalguita de Sefiplan |
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Actualizado: 2018-04-11 |
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De razones y pasiones
La nalguita de Sefiplan
Rafael P�rez C�rdenas
�Le parece fuerte el t�tulo? Imagine entonces el d�a que le hicieron pasar a una persona que cometi� los tres peores pecados en una sociedad hip�crita y mis�gina como la nuestra: ser mujer, ser joven y bonita, y tener un buen empleo.
Este martes, medios y redes sociales hicieron viral las im�genes de un supuesto festejo realizado en las oficinas de la Subsecretar�a de Ingresos de la Sefiplan a cargo de Alejandro Salas Mart�nez con motivo del cumplea�os 23 de Elvia Andrea Mu�oz, secretaria particular del funcionario. Siendo sinceros, sigo sin entender el esc�ndalo, y menos a�n, el linchamiento p�blico de la festejada.
Durante muchos a�os, en pr�cticamente todos los lugares en los que he tenido la oportunidad de trabajar, tanto en el sector privado como en el gobierno, se realizan este tipo de festejos. Las redes sociales dan cuenta de ello, no es algo que desconozca cualquiera que haya estado en una oficina. Es un evento que incluso se promueve para incentivar la integraci�n y el trabajo en equipo
Pero si esto es algo tan com�n, �por qu� entonces el esc�ndalo que agit� las redes y fue la comidilla de miles de usuarios de facebook? �En d�nde est� el pecado? �En el uso de las oficinas p�blicas, en el costo econ�mico del festejo �habr�a que determinar si hay un tope de gasto para festejos de cumplea�os-, o el perfil de los protagonistas?
Honestamente, �hubiera sido el mismo esc�ndalo si el festejado hubiera sido un hombre? �La hip�crita indignaci�n ser�a similar si la secretaria particular fuera una persona mayor o poco atractiva f�sicamente? No lo creo.
Lo que pas� ayer nos deja muy mal parados. Muy pocos se enfocaron en el problema de fondo �si es que lo hay-, que consiste en determinar el uso de bienes p�blicos y en todo caso, el origen del dinero para la compra de los alimentos. Generalmente, en estos festejos, la regla es la coperacha; si en el caso citado se pag� con dinero de la oficina del funcionario, entonces eso tendr�a que ser investigado, y de resultar cierto, sancionado.
Pero no. Muchas voces encendieron las antorchas y se sumaron a la turba lapidaria en contra de una mujer, s�lo por eso, por su condici�n de mujer. Y lo que sucede en estos casos, corrieron miles de comentarios mis�ginos induciendo como verdad absoluta una eventual relaci�n sentimental entre ella y su jefe. Juicios emitidos a partir s�lo de una serie de fotograf�as que fueron p�blicas y que nada ocultan.
Pero aun suponiendo sin conceder que esto llegara a ser cierto, se trata de personas mayores de edad que son responsables de sus actos y de elegir a las personas con las que sostienen una relaci�n sentimental o de trabajo. Acaso, otra vez en el plano de la suposici�n, la falta grave estar�a en que la funcionaria recibiera un trato preferencial, un sueldo que no corresponde a su funci�n o responsabilidad, o que asumiera decisiones que no le corresponden, violentando la norma interna.
Hasta ahora, nada de esto se ha planteado o investigado. S�lo se da por hecho a partir de las im�genes. Entonces, que los sancionen por ello y no por el festejo.
Ayer, muchos usuarios de redes nos convertimos irracionalmente en lo que tanto criticamos al gobierno. As� como alzamos la voz por la irresponsable actitud de criminalizar a las v�ctimas sin mediar investigaci�n �como en el caso de las hermanas de R�o Blanco, a quienes se les se�al� de criminales no por los delitos cometidos sino por la relaci�n sentimental que supuso la autoridad-, debemos reconocer el linchamiento se dio a partir de la misma falsa hip�tesis.
Por supuesto, tambi�n se encuentra como argumento v�lido la falta de criterio y sentido com�n de un funcionario del gobierno estatal, que se solito se puso en la l�nea de fuego en medio de un proceso electoral en que cualquier pecado se magnifica. Eso es pol�tica y eso s� es v�lido.
Lo lamentable, nuevamente, es el escarnio p�blico de la joven funcionaria. Seguramente sus padres, hermanos, pareja o amigos se sentir�n orgullosos del cargo que ostenta, sin embargo, desde ayer conocieron de la manera m�s amarga posible los riesgos que implica la labor en la administraci�n p�blica.
Es cierto, despu�s del duartismo, todos quedamos escamados con el trato que se le daba a las colaboradoras con esas caracter�sticas. La indignaci�n era m�s que justificada porque los veracruzanos fuimos quienes tuvimos que pagar esos excesos.
Pero no es el linchamiento, ese que saca nuestras peores frustraciones, lo que har� que las cosas sean mejor; eso s�lo sirve para hacer catarsis y demostrar que seguimos siendo una sociedad hip�crita y revanchista.
Listo. Suelten a los leones de las buenas conciencias.
Las del estribo�
1. Hablando de redes. Tambi�n corri� profusamente el video de la entrevista Andr�s Manuel L�pez Obrador donde asegura que no usar� el avi�n presidencial, y que si llega tarde a un encuentro con l�deres mundiales, �pues no lleg�. Al parecer el eterno candidato no ha entendido lo que implica ser Presidente. Debe acabar con la frivolidad, jam�s con la investidura.
2. Veracruz tiene las peores carreteras del pa�s, dice la AMOTAC. No s�lo por su estado f�sico sino por la cantidad de delitos que en ellas se comete. Basta salir a cualquier parte del pa�s para darnos cuenta que tienen la raz�n. En Veracruz, seguimos circulando por las carreteras que nos dej� don Agust�n hace m�s de 30 a�os.
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