| Pelear� con todo el viejo tramposo |
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Actualizado: 2018-02-18 |
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Desde el Caf�
Pelear� con todo el viejo tramposo
Bernardo Guti�rrez Parra
El pasado s�bado, se not� a leguas que al PRI y los priistas les cost� trabajo llenar la plaza de toros La Concordia de Orizaba� pero la llenaron. Acaso unos huequitos por ah�, pero nada que ponga en riesgo la chamba de quienes fueron encargados de acarrear militantes.
Ah�, en ese coso con aforo para 8 mil espectadores y en medio de un ambiente muy alejado de la algarab�a con la que fueron ungidos candidatos Fidel Herrera y Javier Duarte, fue nombrado abanderado del PRI a la gubernatura de Veracruz, Jos� Yunes Zorrilla, que estuvo cobijado por el l�der nacional de ese partido, Enrique Ochoa Reza y la plana mayor del tricolor.
Quien se llev� las palmas fue el l�der petrolero Carlos Romero Deschamps, cuyo gremio ocup� casi la mitad de la plaza y fueron los m�s ruidosos, al grado que el candidato lo reconoci� como �hombre recio y firme; hombre sensible al que he visto defender su gremio con valent�a y con tes�n y al mismo tiempo desde su gremio, trabajar por la grandeza de M�xico y por el desarrollo nacional�.
Si alguien piensa que el homenaje de Pepe fue exceso de miel para un bandido, corrupto y ladr�n, se equivoca.
El PRI ser� un viejo nonagenario y achacoso, pero tambi�n es un marrullero tramposo que se va a agarrar hasta del diablo con tal de conservar el poder. Y m�s en esta elecci�n, la m�s dif�cil de su dilatada existencia.
Nadie puede cuestionar que para la presidencia de la Rep�blica, el tricolor escogi� a su mejor candidato en noventa a�os de existencia, y para la gubernatura de Veracruz tiene al mejor abanderado en 20 a�os, pero como partido carga con la peor de las im�genes; la m�s cuestionada, rechazada y aborrecida por una sociedad que nom�s oye la palabra PRI y se le revuelven las v�sceras.
�Qu� hacer para revertir esa tendencia en apenas cuatro meses? Pues nada que no sea recurrir a sus viejas t�cticas, viciadas de origen. Y a priistas como Romero Deschamps que le han dado tan buenos resultados.
Pero hay m�s.
Este s�bado fue la �ltima ocasi�n que Enrique Ochoa Reza visit� Veracruz como presidente nacional del PRI. Sus horas como l�der del partido est�n contadas y su relevo ser� el ex gobernador de Coahuila, Rub�n Moreira, priista de pura cepa que ha sido se�alado por sus paisanos de desv�o de recursos, malversaci�n de fondos, robo, corrupci�n y hasta de tener nexos con la delincuencia.
Es decir, un ladr�n de primera que de acuerdo con el periodista Salvador Garc�a Soto, viol� la ley y los topes de campa�a al usar de manera abierta recursos y programas p�blicos con fines electorales. Gracias a ello, logr� ganar las pasadas elecciones en su estado e imponer, con la ayuda de los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federaci�n, al actual gobernador Miguel Riquelme.
Como se puede apreciar, el sujeto no es ning�n improvisado, sabe para lo que es el dinero y lo usar� en consecuencia, adem�s de que result� un probado operador pol�tico-electoral.
�Tanto ladr�n apoyando a candidatos honorables no har� mella en �stos?
La apuesta es un arma de doble filo cuyos resultados comenzar�n a verse al final del primer mes de campa�a.
�Y qu� pasar� con Veracruz?
Fernando Moreno Pe�a, que fuera designado delegado del PRI en la entidad apenas el pasado 27 de diciembre, no alcanz� a cobrar su primera quincena. Bien pronto dej� ac�fala su oficina para irse como candidato de su partido a una senadur�a.
Para su reemplazo se habla de Beatriz Paredes que ser�a una excelente delegada lo mismo que alguien con sus mismas ma�as.
Pero enfrente no se est�n cruzando de brazos. El gobernador Miguel �ngel Yunes Linares se dej� sentir en el ungimiento de Jos� Yunes. �Y de qu� forma!
Resulta que al t�rmino del evento el l�der cafetalero Nicol�s Cort�s Cruz, fue detenido por polic�as ministeriales acusado del homicidio doloso.
Hasta el momento ni el PRI ni los priistas han dicho nada sobre la detenci�n de este sujeto due�o de un historial bastante turbio. Y quiz� no abrir�n la boca.
Pero una raya m�s al tigre no har� mella en un partido que se est� preparando con todo; literal, con todo, para dar la batalla de su vida contra un sexagenario que ha canalizado a su favor el descontento popular y va muy arriba en las encuestas. Y contra un chamaco inteligente y ambicioso que no vacilar�a en vender a su madre con tal de llegar a Los Pinos.
La batalla ser� b�rbara y el viejo nonagenario marrullero y tramposo, no dejar� la plaza tan f�cilmente. Pelear� con u�as y dientes por lo que considera suyo: el Pa�s.
Eso puedes apostarlo, lector.
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Bernardo Guti�rrez Parra |
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